martes, mayo 06, 2008

Ampurias, más allá del Egeo


Fue en el siglo VII antes de Cristo. Un grupo de comerciantes griegos originarios de la ciudad de Focea, en el Asia Menor, fundó junto a la costa mediterránea la ciudad de Emporion, que significa "mercado". Hace casi dos años, estuve a punto de verla; pero cuando llegámos a la ventanilla de la estación del Norte, ya no quedaban billetes para l'Escala. Cambiamos el destino por Tossa de Mar.


Ampurias funcionó como punto de contacto de los íberos con los productos llegados de Etruria, Grecia y Oriente Próximo. Como contrapunto, sirvió como lanzadera de exportación de productos ibéricos. Sin embargo, con las guerras púnicas, la península ibérica se convirtió en el tablero de ajedrez entre Roma y Cartago. Ampúries apoyó a Roma, pero a partir de entonces la influencia de la ciudad de las siete colinas se instaló como las raices de un árbol, naciendo mas arriba una nueva ciudad romana.
En tiempos de Augusto ambas se unificaron en el mismo municipio. Sin embargo, el poder ya basculaba hacia Barcino y, sobre todo, hacia Tarraco. Ambas urbes, griega y romana, no llegaron más allá del 350 d.C.: fueron abandonadas; la población huyó hacia el montículo de la Palaia Polis en busca de una mejor posición defensiva, dando lugar al pueblo de San Martín de Ampurias.





Entre muros de piedra adiviné la ciudad griega. A los pies de Esculapio, dios de la medicina, erguido sobre los vestigios de su antiguo templo, se extendían callejuelas de muros líticos: vetustas piedras que apenas brotaban sobre sus cimientos. Al fondo, imagen eterna de las pupilas del dios, el azul del Mediterráneo iluminaba este aluvión de piedra, mientras las olas de espuma golpean la costa.
La mente intenta descubrir el Agorá y el Stoá, haciendo manar del vacío columnas de humo que forman un pórtico sobre la brisa marina, para luego, derretirse en el recuerdo.

Aliento de Isis, viento de Serapis, caricias de Zeus, miradas de Esculapio .... Ilusiones de Artemis de Éfeso ... que fluyen por el agua inexistente de las aún visibles canalizaciónes; mosaicos griegos, y más arriba romanos, que emergen de la tierra. Jardines ilusionarios que quizás jamas existieron. Un Foro en la lejanía de la nueva urbe romana. Traspaso la puerta bajo la muralla del anhelo, observando en su exterior, el talismán fálico. He abandonado la ciudad; el sueño ha terminado.





1 comentario:

Admin dijo...

Hola:

Que curiosas las fotos que has sacado, están muy bien. En http://www.trivago.es/lescala-31973/museoexposiciongaleria-de-arte/ruinas-de-ampurias-162925 he continuado viendo fotos y leyendo las opiniones de viajeros que hablan maravillas de la zona. Un saludo